Milquita Velazquez es una Enfermera Argentina radicada hace años en Belgica y desde el comienzo de la guerra entre Rusia y Ucrania esta ayudando miles de Ucranianos que piden refugio en Belgica.

Nos comento que hay Familias con niños pequeños, ancianos y personas en silla de ruedas primero. En los centros de refugiados realizan  distribución de alimentos y bebidas para miles de personas gratuitos.Y agregan mas computadoras debido al caudal de personas que ingresan.

Nos conto tambien que le gusta ver los perros que acompañan las familias.

Ayer me enteré que cada noche llega el último tren con niños, madres y ancianos. El último tren llega tipo 23h.

Hoy una rusa que está de voluntaria vino con los ojos llorosos. Le pregunté qué le sucedía y me dijo que una señora que se estaba registrando le dijo que tenía el corazón partido.
Que mientras ella se inscribia en el ministerio de extranjeros (donde trabajan todos los días aquí) su hijo de 18 años combatía para defender el país y que tenía miedo de perderlo.

Nos miramos con la traductora rusa. Nos miramos. Mojamos los  ojos y continuamos.

Vi una anciana sólita con cara mirando el espacio y con tristeza. Le sonreí y la lleve hasta el personal que inscribe. La observe desde lejos, en esa multitud de ucranianos, y nunca emitió una sonrisa. Siempre con la mirada triste y sin compañía. Se salvo sola.

Mientras escribo, levantó la vista y veo 2 jóvenes de unos 20 años pasar con mi mismo chaleco que dice "voluntarios de crisis cruz roja" escucho los niños corretear y otros llorar. Se escucha el tumulto de voces extranjeras.
Aún les faltan algunas horas para salir de acá, con los papeles en regla, para vivir en éste bello país.
Por un momento pienso que hoy  duermo en mi colchón super confortable.
Anoche dormi poco. Desearía dormir 3 horas pero no! La radio de los policías deambulando en éste gran salón me recuerdan que estoy aquí. Y no en mi cama.
Ellos, los ucranianos, dejaron su cama y sus sábanas limpias lejos de Bélgica. Hoy tienen la ilusión de dormir en alguna cama que le recuerde su casa. Su ex hogar y su nuevo nada.