Viernes 14 de Marzo de 2025

6 de febrero de 2025

Un policía de civil mató a un joven tras una persecución sin identificación en Mar del Plata

Un policía de civil mató a balazos a Matías Paredes tras una persecución en Mar del Plata. La familia denuncia abuso policial y pide justicia.

Matías Paredes, de 26 años, murió en la madrugada del jueves tras recibir un disparo en la espalda. El hecho ocurrió en la intersección de Intendente Goñi y Carasa, en el barrio Bosque Grande, y generó una fuerte conmoción entre los vecinos. Según testigos, un policía disparó contra el vehículo en el que Paredes viajaba como acompañante en el asiento trasero.

policía mató a un joven Matías Paredes disparo persecución Mar del Plata policía Las circunstancias del hecho aún están bajo investigación. De acuerdo con los primeros testimonios, los efectivos policiales involucrados vestían de civil y circulaban en autos particulares, sin identificación. La familia y los vecinos de la víctima aseguran que la persecución se extendió durante varias cuadras y que los agentes abrieron fuego sin previo aviso.

Eran autos sin identificación, lo siguieron por diez cuadras sin dar la voz de alto”, relató el hermano de la víctima, quien señaló que Matías venía de ver la presentación de Alvarado, su equipo de fútbol favorito, y que había pasado a buscar un mazo de cartas junto a sus amigos. “Por miedo, el auto siguió, pero nunca pensaron que los iban a perseguir así”, agregó.

La madre de Paredes, visiblemente afectada, exigió justicia en medio de su dolor. “Me lo mataron, me lo sacaron, queda en la nada porque son policías”, expresó entre lágrimas. La mujer también destacó que su hijo era muy querido en el barrio. “Tiene una criatura de tres años, ¿cómo le voy a explicar lo que pasó? Pregunten a cualquier vecino si Matías era una mala persona. Lo conocen desde bebé”, sostuvo.

Una persecución sin identificación y a los tiros

La reconstrucción inicial de la fiscalía indica que el hecho comenzó en la intersección de Polonia y Fortunato de la Plaza. Allí, un Fiat Palio rojo con tres jóvenes a bordo fue interceptado por dos vehículos sin identificación. Según las imágenes de cámaras de seguridad analizadas por el fiscal Alejandro Pelegrinelli, los policías de civil bajaron de sus autos y dispararon casi de inmediato, sin que se registre una voz de alto o una señal clara de que se trataba de una detención policial.

Los jóvenes, asustados y creyendo que podrían estar siendo víctimas de un intento de robo, intentaron escapar. A partir de ese momento, se desató una persecución que se extendió por más de diez cuadras, atravesando varias calles del barrio. El Palio rojo fue perseguido a gran velocidad por un Bora gris y una EcoSport negra, ambos sin identificación.

“Mi hermano no tenía cómo saber que eran policías. No estaban uniformados, no llevaban una baliza, no dieron la voz de alto. ¿Cómo no van a intentar escapar si pensaban que los querían asaltar?”, se preguntó el hermano de Paredes.

Finalmente, la persecución terminó en la intersección de Goñi y la 37, donde un patrullero bloqueó el paso del vehículo de los jóvenes. Fue en ese momento cuando se produjeron los disparos mortales. Matías Paredes recibió al menos cuatro impactos de bala mientras iba sentado en el asiento trasero del auto. El conductor, en tanto, resultó herido por postas de goma y fue trasladado al Hospital Interzonal General de Agudos.

Los vecinos del barrio Bosque Grande describieron la escena como una “lluvia de tiros”. “Era una balacera infernal, parecía una zona de guerra”, aseguró un testigo que vive a pocos metros del lugar donde el auto quedó detenido. “Se escucharon disparos a 20 cuadras de distancia. Nunca vimos algo así”, agregó.

El relato de la madre y una denuncia de abuso policial

María Elena, madre de la víctima, vivió momentos de extrema angustia al enterarse de la muerte de su hijo. Según su propio testimonio, ella dormía en su casa cuando un vecino golpeó la puerta para preguntarle si Matías había regresado. “Estaba acostada en mi cama cuando vino un amigo de él y me dijo: ‘No se asuste, pero a la vuelta está toda la policía’”, relató.

Al escuchar esas palabras, la mujer salió corriendo hacia la esquina donde había quedado el auto de su hijo. “Llegué antes que mi marido. Quería verlo para confirmar si era él, pero no me dejaron pasar. A pesar de que les di sus datos y la documentación, no me decían si era Matías”, contó. Su hijo yacía dentro del auto, en el asiento de atrás, sin vida.

La desesperación de la familia creció al notar que no había ninguna ambulancia en el lugar. “Estaba lleno de policías, pero nadie llamó a la ambulancia. Mi hijo estaba ahí y no hicieron nada”, denunció. Según su versión, los vecinos intentaron llevar a Matías al hospital por sus propios medios, pero la respuesta de los efectivos fue más violencia. “Ante nuestro reclamo, nos respondieron con una lluvia de tiros”, aseguró la mujer.

María Elena cuestionó duramente el accionar de los policías. “Si mi hijo hubiera sido un delincuente, yo misma lo entregaba para que no lastimara a nadie. Pero él no hizo nada. Lo mataron y lo dejaron tirado ahí. Nadie nos ayudó”, afirmó entre lágrimas. “Lo tuvieron que cargar en una camioneta para llevarlo al hospital. No me entra en la cabeza tanta impunidad”, lamentó.

Los vecinos del barrio respaldaron la versión de la familia y aseguraron que Matías era una persona trabajadora y sin antecedentes. “Lo conocemos desde que nació. Si fuera un delincuente, nadie estaría pidiendo justicia por él”, comentó una vecina.

Avance de la investigación y pericias en curso

El fiscal Alejandro Pelegrinelli confirmó que cinco policías de civil participaron del operativo y que abrieron fuego en reiteradas ocasiones. “Se levantaron múltiples vainas de 9 milímetros en la escena”, informó. A la espera de la autopsia, la fiscalía analiza las armas reglamentarias utilizadas para determinar quiénes efectuaron los disparos que terminaron con la vida de Matías Paredes.

El funcionario judicial también cuestionó la falta de identificación de los policías durante el operativo. “No es normal que no lleven una chapa colocada o alguna señal mínima de que se trata de personal policial”, declaró.

Hasta el momento, los efectivos involucrados fueron identificados y se investiga su accionar. “Uno de los policías pertenece al servicio de calle de la comisaría 16, mientras que los otros tres pertenecen a distintas jurisdicciones”, detalló el fiscal.

Los dos jóvenes que iban en el auto junto a Paredes prestaron declaración en calidad de testigos. Ninguno de ellos tenía antecedentes penales. “En el vehículo no se encontró ningún arma ni ningún elemento que justifique una intervención de esta magnitud”, confirmó el fiscal.

La causa, por el momento, está caratulada como “homicidio agravado”. “Necesito la determinación pericial porque me va a dar la relación de esas armas con cada uno de los funcionarios que intervinieron”, concluyó Pelegrinelli. Mientras tanto, la familia de Matías Paredes insiste en su pedido de justicia y exige respuestas.

* Con información del medio marplatense 0223

COMPARTIR: