Como todas las mañanas me acerque a las instalaciones del Colegio, a los fines de retirar las cédulas que tengo almacenadas en mi casillero, servicio que el mismo brinda a sus colegiados desde tiempos inmemoriales (o al menos desde que ejerzo en esta hermosa profesión); siendo así y que luego de encontrar todas las oficinas administrativas cerradas y a oscuras, pensé que quizás haya un día feriado oun asueto administrativo que no me había sido informado.

En eso, me extraño aún más al ver que habíamucha gente en el hall de entrada, a lo que me acerco y pregunto por esta anómala situación y que ya empezaba a despertar mi espíritu detectivesco, propio de todo colega que se precie de tal. En ese momento me dicen que habían despedido, sin causa y sin previo aviso, a un empleado administrativo que se desempeñaba en el área de Token (área sin dudas indispensable para el ejercicio de la profesión) todo esto en presencia de un escribano público, lo cual resulta aún más peculiar atendiendo que se debería tener cabal conocimiento de la legislación laboral en lo que se supone es el lugar que nuclea el saber jurídico
(evidentemente las motivaciones políticas son más fuertes que los conocimientos jurídicos). En este orden de ideas, me informan que van a hacer retención de tareas, que las mismas empezaron alrededor del mediodía y que van a continuar durante varios días y que los gerentes eran los que se iban a ocupar de atender.

En definitiva mi día termina con el corolario que no pude hacer lo que tenía que hacer.

Pero más allá de ello, y analizando en términos más profundos; hay algo que todavía me sigue inquietando de mi querido Colegio. No voy a poner a ahondar aún más en en la utilización política del mismo, que se está utilizando como plataforma electoral para la Sra. Ana Laura RAMOS, y esto lo digo sin pelos en la lengua, porque en las últimas actualizaciones del Instagram del Colegio no dudan en publicar en conjunto las cosas, siendo que descaradamente nuestra presidenta se desenvuelve como una fiel empleada suya, y si hay algo que nos enseño la política nacional es que los PRESIDENTES TITERES, terminan por muy mal camino, esperemos que la Dra. MONGIARDINO, reaccione a tiempo y tome el toro por las astas para definir realmente si quiere seguir siendo una mera militante de la candidatura de la Dra. RAMOS o si empezará a gestionar a favor de los colegiados (esto claro está, al servicio político de ALAK y KICILLOF). Lo que si quisiera resaltar, es que la profesión liberal tiene cada vez menos beneficios económicos, cada vez más dificultades logísticas, y casi como un colmo de los colmos, el Colegio decide echar a un empleado que nos colaboraba con la gestión del Token, es casi un relato literario antológico

Sin dudas, el desgobierno y el aparato político en el que se convirtió nuestro querido Colegio se ha vuelto un caos, desencadenado hoy en una retención de tareas de sus empleados y un reclamo por un despido arbitrario; por otro lado una oposición blanda y cómplice que nada dice de estas cosas y nos obligan a los letrados de a pie a intervenir y volcar nuestro descontento. Ojalá las autoridades se olviden que son todos empleados del poder político provincial de turno y sepan que tienen que defender los derechos de los letrados de a pie, aunque siendo honesto, esto sigue de mal en peor.