15 de julio de 2025
Detuvieron a un campeón del mundo con la selección argentina de futsal en Comodoro Rivadavia

Matías Rima, ex jugador de la albiceleste, fue arrestado por la Policía tras ser sorprendido con una rueda robada, sumando un nuevo episodio a su historial delictivo
Los agentes acudieron de inmediato y lograron interceptar a Rima a pocas cuadras, mientras caminaba solo con el objeto sustraído.
El presente de Rima contrasta con su pasado deportivo. El 7 de abril de 2019, alcanzó la cima de su carrera al consagrarse campeón del mundo con la selección argentina tras vencer a Brasil por 3 a 2 en la final disputada en el Polideportivo Municipal de Montecarlo, Misiones, ante más de 6.500 espectadores.
Durante el torneo, jugó los seis partidos y anotó tres goles. El equipo nacional superó a Australia, Italia y Sudáfrica en la fase de grupos, eliminó a Francia en cuartos y a Paraguay en semifinales, antes de imponerse a Brasil en la final.
Sin embargo, su vida cambió drásticamente, tal como puede evidenciarse en sus antecedentes policiales en Comodoro Rivadavia.Durante ese episodio, Rima encerró al hijo de 8 años de la víctima en el baño y sustrajo un televisor junto a otros objetos personales. Las cámaras de seguridad registraron el hecho, que tuvo amplia repercusión en la ciudad.
La víctima, Noelia, expresó su dolor: “Como nos conocemos desde que teníamos dos años, lo invité a comer a mi casa. Vino y, como dicen en la jerga, aprovechó para ‘estudiar’ la casa, ver qué había”.Durante el robo, el ex jugador le dijo al menor: “Metete en el baño, vamos a jugar a las escondidas”, mientras se llevaba un televisor, dos celulares y otras pertenencias.
En enero, otra denuncia lo señaló como autor de un robo en el mismo barrio. Una mujer relató que, tras escuchar ruidos, su hijo salió a verificar y se encontró cara a cara con el ladrón. “Me dijo que lo reconoció porque es conocido en el ambiente del fútbol de salón”, declaró la madre.En 2016, cuatro agentes de la Seccional Quinta lo interceptaron en una calle oscura del barrio San Cayetano, junto a un amigo.El caso derivó en una denuncia formal y la intervención de Asuntos Internos, aunque los agentes continuaron en funciones.